Los desafíos y el impacto de la Inteligencia Artificial en Argentina
Argentina se ha colocado en la principal posición en diversas variables vinculadas al fomento público de la Inteligencia Artificial, la gobernanza del proceso y la conformación de una nueva institucionalidad que se adapte a los cambios que supone la irrupción de esta nueva tecnología. Así lo indicó un informe realizado por el gobierno de Chile, que mediante información obtenida por distintos organismos internacionales, fuentes públicas y privadas de la región, analizó las capacidad de los países para adoptar y utilizar esta herramienta.
Esta tecnología produce mejoras en la eficiencia operativa, lo que se transforma en una variable muy relevante en un contexto tan desafiante como el argentino. Esto permite automatizar tareas repetitivas y mejora los procesos comerciales. A su vez, causa un impacto social positivo, gracias a que verdaderamente influye en la experiencia del usuario, por que logra proporcionarle soluciones personalizadas. La IA está permitiendo la creación de nuevos modelos de negocios que antes no eran posibles y que pueden tener grandes beneficios en la economía del país.
Es importante entender que es una herramienta que ayuda tanto al sector público cómo al privado, es decir a los actores de la sociedad en su conjunto. Desde identificar una problemática, sus causas, el armado de un diagnóstico, o incluso ayudar a tomar decisiones frente a escenarios posibles, se trata de un modelo capaz de ayudar a todo el ciclo de la política. Aún así, no ha alcanzado todavía la atención merecida en el debate público teniendo en cuenta su potencial disruptivo.
Sin embargo, no todo es color de rosas, resulta fundamental advertir acerca de los “riesgos éticos” en materia de sesgos de toda clase, debido a que son herramientas diseñadas por las personas, y por lo tanto, cargan consigo los prejuicios injustos que ya están dentro de la sociedad. La regulación será necesaria para aprovechar al máximo la capacidad de impacto y minimizar los posibles riesgos.
¿En qué áreas tendrá mayor impacto la Inteligencia Artificial en Argentina?
La adopción de la Inteligencia Artificial en Argentina, todavía se encuentra en sus primeras etapas, y aún existen demasiadas empresas que no han comenzado a utilizarlas en sus operaciones. La infraestructura limitada y la falta de regulaciones y políticas claras resultan una traba en esta cuestión, pero aún así ya existen sectores que intentan aprovechar el potencial de impacto de esta herramienta:
- Finanzas: Por medio de la automatización de procesos, el sector financiero busca mejorar la toma de decisiones y además poder prevenir el fraude.
- Manufactura: Con el objetivo de optimizar la producción y mejorar la calidad de los productos.
- Salud: El área de salud es la que cuenta con una mayor cantidad de avances que se han podido observar en el último tiempo. Su importancia e impacto social están llevando a que cada vez más servicios incluyan esta herramienta para ayudar en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.
- Retail: Con el fin de mejorar la experiencia del usuario, personalizar las ofertas y optimizar la cadena de suministro.
- Servicios públicos: El objetivo en este caso, está relacionado con la mejora de la eficiencia y la reducción de costos.
Los obstáculos presentes para la adopción de la IA en Argentina
El mercado argentino es arduo, pero lo cierto es que existe un gran talento profesional que hoy desarrolla este conjunto de herramientas de Inteligencia Artificial para el mundo. El sector tecnológico nacional trabaja intensamente en esta materia, demostrando (como habitualmente lo hace) que la ciencia y la tecnología están a la vanguardia en este país.
Sin embargo, el desafío principal radica en contar con la inversión necesaria para que puedan aplicarse y masificarse localmente. Cómo vimos anteriormente, tanto el sector de salud como el de las finanzas, son dos industrias que están pasando por una transición importante. El impacto económico y social que genera la IA puede modificar la realidad de miles de argentinos, y esa debe ser la guía que motive a la industria local para afrontar los obstáculos del presente.
El avance de las nuevas tecnologías resulta inevitable. La revolución apenas asoma sus primeros llamados, por lo que es necesario comprender a estos avances como acompañamientos y herramientas, en lugar de enemigos o reemplazos. Para dominar este “nuevo arte” es preciso diseccionar sus partes, comprender lo bueno y lo malo, y sacar provecho de ello.