Diversidad e inclusión en las empresas: las claves de una transformación con impacto
Las razones detrás de una política que asegure una fuerza laboral igualitaria y diversa son tan poderosas como sus impactos y consecuencias. A continuación, un repaso profundo por ambas esferas.
“El cambio siempre empieza por uno mismo”, dice un antiguo proverbio y la máxima bien puede aplicarse al mundo de las empresas. En efecto, si la idea es ser agentes del cambio social, nada mejor para las empresas que empezar a revisar sus políticas puertas para adentro. En especial respecto a su fuerza laboral.
Y allí la diversidad, la inclusión y la equidad juegan un rol fundamental. En primer lugar, porque contribuyen a fortalecer la llamada Responsabilidad Social Empresarial (RSE).
Que no es otra cosa que la aceptación cabal de una empresa y organización de su lugar en la sociedad. De los impactos que genera en las personas y su entorno.
Si hace años se tomaba la Responsabilidad Social Empresarial como una suerte de “plus electivo” o como una adecuación a normas gubernamentales hoy sabemos bien que no es así.
Y el consenso empresarial así lo indica: toda organización privada debe ser socialmente responsable porque eso forma parte de su identidad y razón de ser.
¿Y qué implica ser socialmente responsable? Generar impactos positivos en las tres áreas más relevantes para las organizaciones: la economía, la sociedad y el medio ambiente.
Acá no hablaremos de todas ellas y del famoso triple impacto, sino que nos centraremos en las políticas que pueden fortalecer nuestra fuerza laboral.
Las ventajas de adoptar políticas de diversidad e inclusión en la empresa
Es importante retener que al hablar de diversidad e inclusión no solo nos estamos refiriendo a valores que deben ser perseguidos per se, sino que también impactan en la propia rentabilidad y competitividad de las empresas.
En efecto, muchos estudios han demostrado que las empresas diversas, igualitarias e inclusivas son también más rentables desde un punto económico. ¿Por qué? Por diversas razones.
En primer lugar, gracias al impacto que eso genera en la creatividad de la empresa, un valor que cada vez se ha mostrado como más indispensable en la economía competitiva de la actualidad.
Los equipos con talentos diversos son los más proclives a llegar a soluciones innovadoras y creativas. Y para ello lo ideal es contar con empleados, colaboradores y think tanks que provengan de diversos contextos, ya sean socioeconómicos, de género, etnia, religión y orientación sexual.
Pero no sólo basta con esa fuerza laboral, sino que los propios líderes de una empresa deben ser diversos, así esos equipos diversos sienten el respaldo necesario para tomar sus propias decisiones y sostener sus puntos de vista.
Y por que así también se genera un sentimiento de pertenencia, clave en la atracción y retención de talentos en una empresa.
Por otro lado, y esto podría considerarse una ventaja colateral, ser diverso en la actualidad indefectiblemente mejorará nuestra reputación de marca. Es por eso que esta política también se debe comunicar de manera eficiente, sin falsedades ni ambigüedades de por medio.
¿Cómo se logran equipos diversos en una empresa?
Así llegamos al gran meollo del asunto: las prácticas y políticas que llevan a una empresa a ser genuinamente diversa e inclusiva.
En primer lugar, se debe pensar en una estrategia integral y orgánica. Esto implica que los dueños, accionistas y líderes de la organización deben creer fervientemente en esta visión y aplicarla en todo el proceso y cadena de valor de la empresa.
¿De qué forma? Acá van una serie de puntos, acciones e instancias a tener cuenta:
- Revisar los procesos de reclutamiento. Es una instancia clave y sumamente sensible por lo que lo más recomendable es contar con el asesoramiento de expertos. ¿Qué términos, preguntas y prácticas debemos pulir para asegurar la diversidad desde el vamos
- Establecer un comité de Diversidad. El mismo podrá encargarse de desarrollar y supervisar todas estas acciones, así como también evaluarlas. En este aspecto también es importante tener metas claras y verificables.
- Repensar las políticas de maternidad y paternidad. Más allá de la legislación vigente, las empresas pueden elaborar acuerdos especiales para los diversos miembros de su staff, ya sea en términos de licencias como de lactarios o flexibilidad laboral.
- Brindar capacitaciones temáticas para todo el personal de la empresa. Hay muchas organizaciones especializadas que pueden ayudar a repensar un tema tan dinámico como la diversidad. Convocarlas puede ser un primer gran paso.
- Revisar bien las políticas remunerativas. Sin equidad en los salarios, no hay igualdad posible. Las brechas salariales deben ser combatidas desde las propias empresas.
- Promover acciones y encuentros para fortalecer la cohesión de los equipos. Los eventos distendidos suelen ayudar mucho a crear ese sentimiento de pertenencia e involucramiento que mencionamos antes.
- Crear programas de crecimiento y desarrollo para todos los empleados. Las oportunidades de crecer dentro de la empresa deben estar disponibles para todos.