Un grupo de científicos de la Universidad de Buenos Aires, está entrenando a un modelo de Inteligencia Artificial con imágenes de resonancias magnéticas para ayudar a la detección precoz de Alzheimer. Esto supone un gran avance para el tratamiento de las patologías neurológicas.

Esta enfermedad es muy difícil de detectar en su etapa más temprana, debido a que es común que los pacientes lo confundan con problemas de memoria, algo característico en las personas de edad avanzada. La detección precoz, es una herramienta fundamental para poder iniciar el tratamiento lo antes posible, ya que de momento no tiene cura, pero que permite retrasar los efectos para mejorar la calidad de vida de quienes lo padecen.

El trabajo de los investigadores es realmente sorprendente. Los modelos de aprendizaje, están siendo entrenados para que la computadora pueda emular la interconexión de las neuronas del cerebro humano y de esta manera pueda identificar los primeros rasgos de esta enfermedad en imágenes de resonancias magnéticas. Por otro lado, estos avances también permitirán conocer el funcionamiento del cerebro humano como nunca antes se había podido.

Esta herramienta promete facilitar muchísimo el trabajo de los profesionales de la salud. Lo que hace básicamente es codificar el cerebro, a partir de la resonancia magnética, lo que observan los investigadores son píxeles de colores en el cerebro, pequeñas porciones de este que se iluminan o no en función de lo que esté sucediendo en esa zona. A partir de estas imágenes, la IA devuelve índices que otorgan la posibilidad de asociarlos a las patologías. 

Las ventajas de trabajar con Inteligencia Artificial para combatir el Alzheimer

La ventaja principal que proporciona el trabajo que se realiza con la Inteligencia Artificial, es que esta le permite a los investigadores crear una red neuronal artificial, que puede ser armada y desarmada como estos necesiten para estudiar al cerebro. Usar esta herramienta desde el trabajo de la neurociencia, permite entender la estructura del cerebro,

El Alzheimer es una enfermedad que se encuentra en constante estudio, cómo se mencionó anteriormente, aún no existe una cura, ya que se trata de una enfermedad degenerativa del cerebro. Sin embargo, la posibilidad de una detección lo antes posible, permite poner en marcha los tratamientos que permiten retrasar los efectos que afectan a la calidad de vida del paciente.

Las IA utilizan nodos que se encuentran interconectados por medio de una estructura de capas, un esquema muy similar al funcionamiento de las neuronas biológicas. Se trata de un sistema que permite a las computadoras aprender de sus errores y de este modo estar en constante mejora.

Es así cómo los especialistas realizan a los pacientes una batería de estudios, entre los que también está la resonancia magnética, para comprender si se trata de una patología cerebral. Luego, esta información pasa a una base de datos, donde los modelos de aprendizaje van a permitir comprender si se trata de esta enfermedad o de otra, en una tarea que promete generar un avance y un impacto positivo en el mundo de la medicina en un tiempo récord.

El esfuerzo del mundo contra el Alzheimer

Lo cierto es que la investigación de la Universidad de Buenos Aires no es la única. En las últimas semanas se han conocido varios estudios que están utilizando la Inteligencia Artificial para combatir esta enfermedad neurodegenerativa. 

En Hong Kong, están desarrollando un modelo basado en esta tecnología que utiliza la información genética para predecir la posibilidad de que una persona desarrolle Alzheimer. Otro buen ejemplo es el del trabajo en conjunto de la Universidad de California y el Trinity College de Irlanda que crearon un método que identifica distintos tipos de demencia sin intervención humana. 

El trabajo y desarrollo en conjunto de la comunidad científica, apoyándose sobre la IA para combatir las enfermedades y mejorar la calidad de vida de las personas, es un mensaje esperanzador para la sociedad. Un verdadero ejemplo de que el trabajo en equipo con la ayuda de las nuevas tecnologías puede generar un impacto positivo en la sociedad.